Reducir hasta 25% de emisiones es la gran meta en Copenhague

Se espera que tanto China como EEUU tomen medidas más claras y creíbles

El consenso previo a la cumbre de Copenhague, donde se discutirá en diciembre próximo los pasos a seguir para sustituir al protocolo de Kioto, que expira en 2012, se centra en la idea de que dos de los grandes emisores de gases de efecto invernadero (GEI), China y EEUU, establezcan compromisos claros y creíbles de cara a la reducción de contaminantes atmosféricos.
"El gran reto en esta cumbre" -dice Juan Carlos Sánchez, miembro del Panel Intergubernamental para el Cambio Climático de las Naciones Unidas, IPCC por sus siglas en inglés- "es que las principales economías del mundo, tanto las desarrolladas como las emergentes, como Brasil, China, India, Corea y México, asuman metas reales de reducción de emisión de gases; que esa reducción sea de 20 a 25% para el año 2020 en comparación a lo que se emitía en 1990. Eso es lo que necesitamos para que la temperatura promedio global no suba más de 2 grados centígrados durante le segunda mitad del presente siglo".
Diego Díaz Martín, jefe del Departamento de Estudios Ambientales de la Universidad Metropolitana y presidente de Vitalis, estima que en la capital danesa "se deberían establecer mecanismos de seguimiento mucho más eficaces y evitar las declaraciones ambiguas como las de China y EEUU de comprometerse a una 'notable' reducción de GEI. EEUU, en particular, debería ser más preciso en sus pretensiones, terminando de asumir su compromiso con el mundo y evitar anuncios vacíos de credibilidad. El nuevo protocolo debería comprender acciones concretas y contundentes para llevar las concentraciones de CO2 a niveles de 350 partes por millón (ppm), considerada por los especialistas como la más segura. Ahora esa concentración supera las 387 ppm".
Sánchez añade que las negociaciones en Copenhague serán "distintas" a las de Kioto, porque para 1997, cuando se firmó el protocolo japonés, "había gran desconocimiento de lo que era cambio climático y hoy hay más información al respecto. Kioto como documento ha sido exitoso, pero una cosa es el papel y otra la voluntad política de cada país; hay países que lo firmaron y no han cumplido, porque sus emisiones de gases han crecido. Una cosa es comprometerse y otra que cumplan".
DIARIO EL UNIVERSAL